Principalmente, la calidad de los materiales y los acabados, así como la facilidad de comunicación a la hora de resolver incidencias o aportar sugerencias. Lo primero es importante porque para nosotros es vital que la experiencia de nuestros clientes sea homogénea desde principio a fin. Por ello nos preocupamos en servir productos de calidad que supongan una garantía de seguridad a lo largo del tiempo y por lo que valga la pena apostar. 

A lo largo de los años COYSA ha tenido la oportunidad de trabajar con muchos proveedores, pero siempre nos ha sorprendido como MADERÓ ha entendido como destacarse y ofrecer algo nuevo. Escoger MADERÓ es para nosotros garantía de diseño y calidad.

Principalmente en la calidad, el catálogo de estilos y el nivel de detalle con el que se puede personalizar cada producto. Las piezas gozan de un atractivo natural que no dejan a nadie indiferente. Hay una colección para cada tipo de persona y no por ello se pierde el aura sofisticada y distinguida en cada mueble, la cual es elevar los espacios a un nivel superior. Además, el servicio técnico no puede ser mejor, rápido y fiable.

¿Qué materiales de la gama de Maderó son los mejores para un baño?

Toda la gama de mármoles, granitos, porcelánicos y piedras son ideales por sus características, aunque es cierto que la madera siempre da un toque cálido, muy agradable y buscado en muchos proyectos.

Los factores clave de todo proyecto son el presupuesto, las características del espacio y el tipo de baño que deseamos. Estos son los pilares sobre los que todas las decisiones deberían tomarse. Cada uno de ellos conforma una entidad independiente, pero indirectamente vinculada, en la que encontrar el equilibrio es fundamental de cara a conseguir un resultado satisfactorio. En COYSA nos preocupamos por mantener un catálogo actualizado y actual en el que prima la calidad, para ofrecer soluciones que se adapten como un guante a los requerimientos del cliente y su proyecto.

En los últimos años MADERÓ ha creado auténticas joyas. No obstante, VELVET tiene algo que hechiza. Es un mueble de estilo midcentury muy especial y con un toque bastante sexy que seduce a cualquiera. Es una auténtica obra de arte como la que solían hacer antaño los artesanos más dedicados.  Los acabados son muy finos y el aspecto soberbio.