MÁRMOL O PORCELÁNICO, ¿NOTAS LA DIFERENCIA?

«La fuerza de lo natural (mármol), las ventajas de la tecnología (porcelánico)»

La evolución, la tecnología llega también al interiorismo. Cuando hablamos de mejoras de producto en el mundo de la decoración y el baño, no se trata exclusivamente de mejoras aparentes que afectan al diseño. Somos firmes defensores de que el diseño es sinónimo de funcionalidad, de mejoras en el uso que sirven para mejorar la vida de las personas. Hoy queremos tratar un tema que está muy presente en los proyectos de reformas de baño y del hogar y, sin embargo, sobre el que se percibe mucho desconocimiento y del que nosotros podemos hablar mucho por ser una de nuestras especialidades: la manipulación de materiales como los mármoles o los denominados porcelánicos.

¿QUÉ ES UN PORCELÁNICO?

El gres porcelánico (comúnmente conocido como porcelánico) es un tipo de baldosa cerámica prensada en seco, con muy baja absorción de agua y con una elevada resistencia mecánica. El porcelánico es la baldosa cerámica con mejores propiedades mecánicas: resistente, limpia e impermeable. Estas características de base permiten aplicar este material a todo tipo de superficies y espacios. Sus evidentes ventajas en el uso y su larga durabilidad, se reflejan en el precio y el complejo sistema de colocación.

El sistema de fabricación permite crear formas de grosores bien distintos y formatos de toda clase. A pesar de su denominación, el porcelánico no es un derivado de la porcelana que se aplica a objetos como la vajilla, mucho más frágil y transparente. El porcelánico, por su tipo de composición, tiene un alto grado de opacidad que lo hace extremadamente apto para espacios como una piscina. Ofrece una baja porosidad por debajo del 0,5%.

La gama de porcelánicos existente en el mercado ha permitido crear opciones que imitan en la apariencia de color y textura a la madera con un resultado mucho mejor en resistencia y durabilidad.

En cuanto a su uso en el baño, el porcelánico, permite una manipulación para convertirlo en la forma de uso que mejor convenga: encimeras, lavabos, frentes del mueble, etc. que aportan un alto grado de singularidad al resultado final del mueble de baño. Es cierto que el conocimiento de su manipulación para este tipo de aplicaciones, es compleja pero nos llenamos de orgullo al poder demostrar a través de nuestros productos de baño, la enorme experiencia acumulada en el tratamiento del porcelánico. Los resultados nos avalan.

¿PORCELÁNICO O MÁRMOL?

Ambas son dos grandes opciones que ofrecen resultados maravillosos cuando se aplican sobre un mueble de baño o, por extensión como revestimiento del espacio. Cada uno ofrece sus particularidades y seguramente, la mejor manera de decidirte por uno, es valorar las prioridades enfrentadas a los valores que ofrece cada producto. Te listamos algunas características de comparativa entre mármol-porcelánico:

1. El mármol es una piedra natural más porosa que absorbe y se mancha mucho más que el porcelánico.
2. A pesar de encontrar una oferta importante en ambos materiales en cuanto a acabados, el mármol, por su naturaleza, es un producto más caro.
3. El porcelánico se fabrica, es un producto artificial por lo que cuando lo recibamos, nos encontraremos exactamente con lo que habíamos visto en el muestrario mientras que el mármol, al ser una materia noble, natural, puede variar de unas partidas a otros y, ademas, cambiará con el tiempo, por efecto de la luz, el uso, la limpieza, etc.
4. En ambos casos podemos hablar de valores que comparten como: gran variedad de opciones de acabados, un aspecto elegante en todas sus aplicaciones, un efecto de diseño atemporal…

Dicho todo esto, como comentábamos antes, hay varios factores que pueden inclinar la balanza hacia un porcelánico o un mármol aplicado a un mueble de baño. El peso lo pondrá las prioridades de tu proyecto de reforma de baño. ¿Quieres saber más?